"El Pato Donald en los dibujos animados, como los desdichados en la realidad, reciben sus golpes para que los espectadores aprendan a habituarse a los suyos. El placer en la violencia que se hace al personaje reconvierte en violencia contra el espectador, y la distracción se transforma en esfuerzo.” (T.W.Adorno, Dialéctica de la Ilustración)
La obsesión por el (auto)flagelamiento en el pato donald, quien es golpeado y entre aquellos 'yo', en risas -falsa felicidad- me acostumbro a los 'míos'. Ahí en esa ficción animada, en lo potencialmente irreal, en el coyote * callendo por un acantilado, estoy 'yo'. Mareado, enceguecido por la industria quien me adormece dentro del dolor de mis propias heridas, quien (in)directamente me acostumbra a esa tortura.
Así como Kurt Cobain se lanza contra la batería en mitad del espectáculo, rompe la guitarra, se azota contra el piso, -y luego muestra su cuerpo en pie, victorioso- el público aplaude y ovaciona aquel gesto heróico.
La presencia grunge en el dolor y batalla individual del desencanto, en el golpe contra la batería, está esa misma yaga de donald que, en vez de risas, demuestro y adopto con aplasos; que entiendo y que sé, porque es también 'mi' dolor. La falsa experiecia, la virtualidad e inmediatez de las realciones contemporáneas. Cómo el otro, la pantalla, el (anti)héroe contemporáno vienen a suplir 'mi' experiencia. Una experiencia falta de contenido, sustitíble; cómo finalmente aprendo y conozco el mundo a través de la imagen,el videojuego, los dibujos animados, o la figura 'de-moda'.
*thanxmix
2 Comments:
aunque con lo mucho q te pareces al correcaminos, dejame decirte mi querida angelusa, que el que cae es el coyote.
A mi me gusta más Daffy Duck =)
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